martes, noviembre 07, 2006










De dulce y agraz


En honor a la verdad, nada ha salido como uno lo ha planeado o pensado. Si digo esto, es debido a los últimos acontecimientos (en especial, de los deportivos).

Primero que nada, me da rabia que los colocolinos ganen todo y a todos, que siempre digan que son la mitad más uno de Chile y se crean el "hoyo del queque". Como siempre digo, si Colo-Colo es Chile, me da verguenza ser chileno. En todo caso, llegará la venganza de una u otra forma y tengo la esperanza de que las rachas se acaban.

También debo destacar el éxito alcanzado por Ñublense, el equipo de mi ciudad natal Chillán, que despues de muchos años, pudo subir a Primera División (o Primera A, para los más cuicos). Pero la alegría no fué completa, ya que no se pudo festejar el título ya que Lota Schwager aguó la fiesta. Esto índica que cuando al pueblo se le dá mucho, se puede subir facil por el chorro. Lo bueno también es que la gente decente y honesta de éste país (por ej, Harold Mayne Nicholls en la ANFP) está ganando espacio ante tanta corrupción acumulada durante todos estos años. Ya es hora que el Bajo Pueblo (o Estado Llano, en términos de la Revolución Francesa) se ubique en el lugar que le corresponde y no alegue tanto, ya que muchas de las miserias son por culpa de su mediocridad e ineficiencia.
La verdad es que la corrupción en Chile está llegando a límites que no se puede tolerar. Admiro mucho, por ejemplo, la decisión del senador Flores de apartarse de esa cloaca en que se ha convertido el PPD (Partido por la Democracia o para puro darle (al billete, se entiende)). Se nota que él es de esas personas honradas (a pesar que sirvió a Salvador Allende) que quiere ayudar al desarrollo del país, apartandose de las malas influencias.

1 comentario:

Leonardo Figueroa dijo...

Compañero, por poco me creo que esta entrada la escribió Chupete Aldunate en persona.